La historia del club JC Tatran Praha se remonta a los años setenta. Los entusiastas del judo se entrenaban en la Unión Deportiva y Educativa Tatran Praga 7, que agrupaba varios deportes diferentes. Entre ellos había una sección de judo. 

Los entrenadores de judo también organizaban cursos de defensa personal, muy solicitados en aquella época. Incluso antes de 1989, los judocas consiguieron viajar varias veces al extranjero y participaron en competiciones amistosas internacionales. Después de 1989, los judocas decidieron independizarse y fundaron la asociación cívica Judo Club Tatran Instalace Praha. La palabra Instalace se incluyó en el nombre del club como agradecimiento al patrocinador principal. Entre los fundadores de la asociación cívica en aquella época se encontraban Radek Podrabský, que se convirtió en el primer presidente del club, así como Jaroslav Štoček, Jiří Plíva, Dana Satscheková y Bivoj Kalaš. 

El equipo solía utilizar para sus entrenamientos el gimnasio de la calle Veletržní. A principios de los años 90, sin embargo, se vio obligado a abandonar estos locales y fue necesario encontrar otros nuevos, preferentemente en Praga 7. En estos locales entrenamos durante muchos años. Gracias al tamaño del gimnasio, se podían desarrollar allí clases de judo para niños, incluso para los que empezaban a los 6 años. Los entrenadores principales en aquella época eran Jaroslav Štoček y Bivoj Kalaš, Pepa Myslivec y Dana Satscheková. En 2006 nos vimos obligados a mudarnos de nuevo. Dejamos las instalaciones del Gymnasium nad Štolou y acordamos con Sokol Bubeneč.

Teníamos un dojo, pero fue un gran cambio para nosotros. El espacio del Sokol era mucho más pequeño de lo que estábamos acostumbrados. Pero ni siquiera eso nos desanimó y seguimos entrenando aquí con mucho gusto. Tenemos nuestro propio tatami y niños y adultos entrenan aquí todos los días, incluso fuera de los viernes. Un gran éxito es la creación del grupo de entrenamiento Baby Judo, al que acuden judokas a partir de 5 años, y que es el vivero de nuestro grupo de competición. Lo que nos hace especiales es que cualquier persona, a cualquier edad, puede iniciarse en el judo, tanto si lo considera un deporte como una filosofía de vida. Esto es lo que nos diferencia de los demás y estamos justamente orgullosos de ello.